WASHINGTON, D.C.- La Senadora por California, Dianne Feinstein, falleció a los 90 años de edad, a consecuencia de una enfermedad que la había mantenido alejada de la actividad política en el Capitolio.
Feinstein pasará a la historia como la mujer que más tiempo ha ocupado un asiento en la legislatura federal, y su vida fue marcada por la tragedia pues asumió la alcaldía de la ciudad de San Francisco, en a 1978, tras el crimen de quien fuera el titular de ese cargo, George Moscone y el Supervisor Harvey Milk.
De hecho, sin imaginarlo y sin mayor experiencia política, Dianne asumiría una responsabilidad que la mantendría de por vida dedicada a la función política.
Una característica de su convicción personal la puso de manifiesto incluso en medio de la enfermedad que le aquejaba, (y que solo se manejaba como “serias complicaciones”) pues no hizo eco de las voces de sus propios colegas de partido (demócratas) que pidieron que renunciara al cargo para que no se perdiera el asiento ante el Congreso Federal.
No obstante, dejó claro que no pensaba relegirse.
Su lucha en contra de la falta de control legal en el uso de las armas de fuego y en favor del medio ambiente fueron una constante de la labor legislativa de la representante californiana nacida en San Francisco.
Como es sabido la legisladora se mantuvo en el cargo argumentando que no podía fallarle a sus electores, cumplió tres décadas de incansable labor legislativa, tiempo que Feinstein dedicó sin descanso a la representación de los californianos.
Su nombre completo fue Dianne Goldman Berman Feinstein y sirvió en el Senado de 1992 a 2023 en su encomienda.
Le sobrevive su hija Katherine.