Si alguna vez le resultó difícil realizar una tarea desafiante en el trabajo, estudió para un examen importante o dedicó tiempo a un proyecto complicado, es posible que haya deseado poder aumentar su capacidad de concentración.
La concentración se refiere al esfuerzo mental que diriges hacia lo que sea que estés trabajando o aprendiendo en ese momento. A veces se confunde con la capacidad de atención, pero la capacidad de atención se refiere al tiempo que puedes concentrarte en algo.
Varias técnicas pueden ayudar a mejorar la concentración, algunas con más apoyo de investigación que otras.
La mayoría de las personas olvidan las cosas más fácilmente a medida que envejecen, y la disminución de la concentración puede acompañar a la pérdida de memoria. Las lesiones en la cabeza o el cerebro, como una conmoción cerebral, así como ciertas condiciones de salud mental también pueden afectar la concentración.
Es fácil sentirse frustrado cuando intentas concentrarte pero simplemente no puedes. Esto puede provocar estrés e irritación, lo que tiende a hacer que concentrarse en lo que necesita hacer sea aún más un sueño lejano.
Si eso le suena familiar, siga leyendo para obtener más información sobre los métodos respaldados por la investigación para ayudar a mejorar su concentración.
Hay estudios que sugieren que pasar 15 minutos al día, 5 días a la semana, en actividades de entrenamiento cerebral puede mejorar la concentración.
Los juegos de entrenamiento mental también pueden ayudar a desarrollar su memoria de trabajo y de corto plazo, así como sus habilidades de procesamiento y resolución de problemas. Se puede intentar sudoku, crucigramas, ajedrez, rompecabezas, búsquedas de palabras o codificaciones, juegos de memoria.
La privación del sueño puede alterar fácilmente la concentración, sin mencionar otras funciones cognitivas, como la memoria y la atención. Estar demasiado cansado puede incluso ralentizar sus reflejos y afectar su capacidad para conducir o realizar otras tareas diarias.
El aumento de la concentración es uno de los muchos beneficios del ejercicio regular.
Si es difícil encontrar tiempo para hacer ejercicio o no quiere inscribirse en un gimnasio, intente pensar en formas divertidas de hacerlo durante el día. Si aumenta su ritmo cardíaco, está haciendo ejercicio.
Los alimentos que come pueden afectar funciones cognitivas como la concentración y la memoria. Para aumentar la concentración, evite los alimentos procesados, el exceso de azúcar y los alimentos muy grasosos o grasosos. Diferentes métodos funcionan para diferentes personas, por lo que puede ser útil probar una variedad de técnicas.