La llave

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Conexión espiritual que ha permitido a escritora latina desintoxicar su vida

SAN DIEGO.- ¿Cómo sería su vida si no pudieran ver? ¿cómo verían a las personas que están a su alrededor?. No podrían criticar, no podrían juzgar, no podrían hacerse un juicio porque la vista es uno de los cinco sentidos y son solo para nosotros”.

Con esta desafiante reflexión inició la escritora Nurkia Rudametkin la conversación que ofreció ante las integrantes de Celebrando Latinas Boutique.

“Cuando tu despiertas a la vida con una nueva mirada, creo que tu vida cambia. Y esa ha sido parte de mi experiencia durante 20 años, ya que desde niña, desde la edad de cinco años tuve la oportunidad y la bendición de compartir mi niñez y mi adolescencia con una prima que es invidente”, afirmó  esta mujer amante de las letras nacida en Ensenada, Baja California, México y quien ahora reside en San Diego.

“Mi prima Gloria”,  subrayó, “nació de 5 meses. Mi tía tuvo amenaza de aborto y cuando la llevaron al hospital, pues era gemela y le dieron atención a la niña más grande y a mi prima Gloria pensaron que no iba a vivir, la metieron a la incubadora, sin vendarle los ojos. Milagrosamente ella fue la que vivió y la otra niña lamentablemente falleció”.

“Redescubrir una nueva vida”

“Entonces,  yo siempre me pregunto”, reflexionó,”¿cómo juegas con una niña que no ve?. Entonces esa fue mi infancia. Yo tuve la bendición, como les digo, de convivir con ella y redescubrir una nueva vida, un nuevo camino sin esta mirada. Ella me enseñó a no criticar, pues si tenenos la vista pero… es como ir más hacia el fondo, más hacia la parte emocional y espiritual”.

“Ella me enseñó este camino”, agregó Nurkia con evidente convicción, (y cuando ambas tenían 20 años), “mi tía (Beba), la mamá de mi prima fallece y vino una etapa difícil en nuestra vida, pues era para mi como mi segunda mama”. 

“Un golpe muy duro”

“Yo continuo mi vida”. Termino mi Universidad. Ella (la prima Gloria) vive en Carson, California, entonces por eso en mis vacaciones, pues iba a visitarla en navidad, en semana santa, en verano y pues mi tía era como mi segunda mama. Fallece mi tía y la verdad fue un golpe muy duro para mí”.

En efecto, Nurkia, quien se recibió en Comercio Exterior y Aduanas del Tecnológico Universitario de Baja California, Campus Ensenada, pronto se daría cuenta, sin embargo, que su verdadero camino y su motivación por la vida estaba en otra parte y lo describió con toda claridad:

“Yo salía de mi casa y entraba a la oficina y me sentía muy triste. Me sentía tristísima, pues decía: ¿cómo va a ser esta mi vida? Yo sabia que quería ayudar de alguna manera a la gente, pero no sabia cómo. Entonces, entraba a la oficina y me sentaba y empezaba a hacer comercio exterior, entonces pues era importaciones, compras. Todo como muy rutinario y la parte del papeleo y todo esto…”

Luego le llegaría una crisis existencial profunda, recordó: “Entonces empecé a entrar en una depresión, quién de aquí se ha sentido depresión o tristeza, quién de aquí se ha sentido que la vida no tiene sentido, es como un hoyo profundo y es como que estás sin vista, en ese momento me sentí sin ojos, o sea dije qué es esto, cómo va a ser mi vida. Yo llegaba del trabajo y lloraba y decía: Dios mío, algo más tiene que haber en mi, algo más tiene que haber…Para qué vine a este mundo”.

Llamado de los ángeles

“Y en ese momento, a los 23 años”, indicó Nurkia, “me dije esto tiene que cambiar. Una voz me dijo: Tienes que escribir algo. Fue como, en ese momento no sabia que eran los ángeles, pero para ya voy. Entonces recibí esa información y dije: Okey voy a escribir la historia de mi prima Gloria porque ahí fue donde me di cuenta que yo tenía todo: salud, dinero, amor… todo y mi prima estaba (sin vista) y sin mamá.  Entonces era por qué me estoy cortando las venas en algo que, al contrario, debería estar feliz, pero no encontraba esa Felicidad”.

“Empecé a escribir y en ese momento fue cuando se abrió como una ventana . Cuando yo estaba en este ‘buckle’ negativo de tristeza, de dolor, me agarré de las letras y la persona que me enseñó a conectar con la imaginación fue mi prima Gloria y mi tía Beba, pero la persona que me enseñó los libros fue mi mama”. 

Su primer libro

Fue en ese momento de la charla cuando la ahora exitosa escritora hizo una retrospección a su pasado: “A los 9 años yo tuve la bendición de leer mi primer libro: El Milagro más Grande del Mundo de Og Mandino, (siendo) una niña de 9 años. Yo no me pude ir de vacaciones a Carson y mi mamá me dijo, no se me olvida: Vas a leer este libro, -porque era lo primero que tenía a mano-, pero no me vas a hacer trampa,  me dijo, porque como yo ya lo leí, me vas a platicar capítulo por capítulo”.

“Entonces dije mmmm… Como no podia haber television en ese tiempo, me tocó también la bendición de no tener redes sociales. Agarré el libro y empecé a leer y nunca, nunca, se me va a olvidar la imagen que pude percibir a través de las letras y era un hombre alimentando a las palomas. Para mí fue…Guauuu…se abrió esta ventana de oportunidad y empecé a amar los libros. Entonces, durante el tiempo que yo, en mi adolescencia, nunca dejé de leer. La literatura ha formado parte de mi vida.

De tropiezo en tropiezo

De nuevo a la realidad de la Nurkia escritora en ciernes recordó que para poder publicar su primer libro tuvo que tropezar con los amargos momentos que padecen todos los noveles escritores, por el sinfin de obstáculos y condiciones que suelen poner la gran mayoría de las editoriales, que ella describe como un ambiente “muy escabroso”, lo cual pudo al fin superar por las opciones que ofrecen editoriales como Amazon.

“Cuando me encuentro en este buckle negativo o, crisis existencial o depresión, como le quieras llamar, me acuerdo de los recursos que temenos para salir adelante. Y sí, mi recurso fue la literatura. Entonces, a la par que yo descubrí mi vocación de escritora, fue como pude empezar a salir de ese hoyo profundo y pude sopesar el tiempo entre mi trabajo de lo que había estudiado y la meta de escribir un libro”.

“Hice a un lado la historia del regalo, que así se llama y ahí sigue todavía, la  hice a un lado y dije: Bueno, voy a fluir. Y empecé, empecé…a crear una nueva novela. Que es mi primera novela, que claro que la leo y digo cómo me atreví en esos tiempo a escribir escribir esta novela, pero me atrevj, Y cree esta novela: La Huida, mi primera novela. Hasta el título me delata. Es subconsciente, quería huir, o sea me quería huir de donde estaba”.

Entonces, gracias a esta novela, pude sobrellevar, pude encontrar mi camino, pude conocer mucha gente, pude ir abriendo puertas muy lentamente, porque el camino de la literatura es muy escabroso. Las personas que escribimos sabemos que esto no es nada fácil. Bueno, como todo lo que cuesta es parte de que al final va a venir una recompensa.

Después de La Huída (Editorial Cambridge Brick House Inc. Y Amazon, 2008), su primera novela, publicaría Expediente 93 (Publicado en 2011 por el Instituto Politénico Nacional), Vida Arrabalera (Amazon, 2017) y La otra cara del asesino (Amazon 2019), todas ellas que son hoy  grandes éxitos editoriales.

Pero además de las novelas, Nurkia encontraría el sendero buscado 

en la reconexión con Dios, un camino del que se había separado durante algún tiempo, reconoció y lo hizo tras la aparición reveló de un rayo de luz que vería a través los ángeles celestiales y que le cambiarían la vida por completo.

Encuentro espiritual

A la fecha, ha escrito otros cuatro libros a los que afirma, ha sido conducida o guiada por los ángeles producto de ese encuentro espiritual con el creador. De ahí nació, en tiempos en que escribía Vida Arrabalera, publicó La Llave (Amazon, 2015),  de contenido espiritual, un libro de autoayuda “para quienes buscan el equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu”, luego seguirían Mensajes de Tu Ángel (Amazon, 2017); Desintoxica tu vida (Amazon, 2018), Enciende la Luz en la oscuridad (Amazon, 2020), los 4 en los que explica cómo se da esta conexión espiritual.

Nurkia Rudametkin exhibe sus 8 libros en la vitrina de Celebrando Latinas Boutique y está disponible para responder a la inquietud del público , llamando al teléfono (619) 426-1491 1105 Broadway Suite 206, Chula Vista, CA 91911, acerca de su apasionante vida de conversión emocional y espiritual.